miércoles, 24 de septiembre de 2014

La emprendeduría y la edad no están ligadas

Siempre me ha dado mucho coraje escuchar a alguien decir “ya soy muy mayor para estudiar un idioma”, “si fuera más joven volvería a la universidad”, “a estas alturas ya no vale la pena apuntarme al gimnasio”…y me pregunto ¿por qué? Nunca es tarde para hacer lo que a uno le venga en gana; si eso le hace feliz… Adelante!!!

Cuando entramos en nuestra zona de confort de la que no hay necesidad de salir tendemos a creer que ya es demasiado tarde para iniciar lo que algún día quisimos. Con tal de autoconvencernos de tener la razón inventamos excusas basadas en que ya somos muy mayores, en que muchos se nos han adelantado y ya voy tarde o en el qué pensarán los demás cuando vean a alguien como yo haciendo algo así.

Si interiormente lo estás deseando, pero crees que visto desde el exterior está totalmente fuera de lugar ¿por qué no comienzas preguntando la opinión de aquellos que te son de referencia? La opinión de quienes pueden impulsarte, de quienes sabes que quieren lo mejor para ti, puede ser en estas ocasiones el empuje definitivo que necesitas para comenzar ese proyecto que tanto te inquieta.

Si lo que ocurre es que tienes miedo a equivocarte, piensa que este es un miedo irreal que no vas a poder confirmar hasta que realmente te hayas equivocado, si este tuviera que ser el caso. Piensa que sin hacer lo que más deseas seguro que te estás equivocando, porque estás cerrando la puerta a un camino que puede hacerte un poquito más feliz. Una de las claves de la persona emprendedora es que está dispuesta a fracasar, sin entender el fracaso como el final, sino como un punto de inflexión en el que tiene la oportunidad de aprender y de perfeccionar ese camino que decidió emprender para poder así hacerlo cada vez más perfecto.

La persona con espíritu emprendedor no debe basar sus excusas y reticencias en sus debilidades, sino centrarse en sus fortalezas para convertirlas en los anclajes del proyecto que va a iniciar. Para ello, además, necesitará tener claro que hay que trabajar duro, que hay que ser constante y sobre todo que hay que ser muy paciente, pues el éxito no se consigue de la noche a la mañana, sino que llega en el momento menos esperado, pero no sin antes habiendo consolidado ciertas metas.

Hasta aquí sólo te puedo decir algo que deberías grabar a fuego en tu mente cuando estés buscando las excusas que encabezan este artículo: “Que sea demasiado tarde o no depende sólo de ti”.

Si estás decidido, si tienes el apoyo de los demás, pero sobre todo el tuyo propio y si además estás dispuesto a luchar, trabajar y no desistir ¿a qué estás esperando? Vamos!!, el reloj juega en tu contra y en esta vida el tiempo es el tesoro más preciado.

Sé valiente, atrévete y lánzate... sólo tú creas tus propios miedos y sólo tú puedes vencerlos.


miércoles, 17 de septiembre de 2014

El rol de la escuela en el contexto 2.0

En pleno siglo XXI en el que las TIC (tecnologías de la información y la comunicación) ya están inmersas en todos los contextos en los que nos movemos, reflexiono hoy sobre los cambios que ello ha supuesto en uno de los contextos clave que determina el futuro del niño: la escuela.

La presencia de las TICs en la escuela ha supuesto un cambio en el rol de ésta, pues deja de ostentar el monopolio del aprendizaje como fuente del mismo para jugar un papel de mediadora entre lo que el alumno rescata a través de las redes sociales y de Internet y lo que conviene que extraiga de esta información para hacerla práctica y provechosa en su fase educativa-formativa.

Considero que la escuela no ha perdido su razón de ser, sino que está experimentando una necesaria readaptación a esta nueva era tecnológica. La escuela es ahora el lugar que ayuda a los aprendices a integrar la información que yace en el mundo online dándole forma, orden, contexto y lógica para poder adaptarla al mundo offline en el que el alumno se desenvuelve. Por lo tanto, la escuela sigue ocupando un rol clave y central, aunque sí es cierto que diferente al tradicional.


Muchos docentes han entrado en pánico cuando se han visto obligados a utilizar las NTIC y sienten que saben menos que sus alumnos y han perdido el control sobre ellos. En ningún periodo de la historia de la educación sucedió que los estudiantes pudieran saber más sobre algo que el propio maestro. Pero sólo se consigue superar este "miedo" cuando se es consciente que el rol principal ahora es el de ayudar al alumno a evaluar los resultados de su búsqueda y tomar las mejores decisiones.

Es momento de dejar de lado ciertos prejuicios como que el docente tiene que ser el experto y empezar a aceptar un nuevo paradigma que se mueve más en la posibilidad de que exista un beneficio mutuo entre maestro y alumno. Como en cualquier relación 2.0, ambas partes contribuyen activamente en el aprendizaje y en la construcción a través de compartir experiencias y conocimientos.

El mejor profesor que yo haya tenido no fue el que más sabía, sino el que más atractivo me hizo el estudio. Por eso, no hay que ser un experto en TIC para poder seguir siendo un buen maestro, pues puede seguir siéndolo si sabe generar interés durante el aprendizaje del alumno, aunque ahora ese aprendizaje sea en parte bidireccional. El mejor maestro no es el que siempre tenga una respuesta para el alumno, el mejor maestro será el que sin saber una respuesta lo reconozca y le diga al alumno que juntos van a buscarla. Hacer partícipe al alumno le genera a éste un sentido de utilidad que le facilitará la inspiración, la implicación y la motivación en la absorción de lo que el maestro trate de explicarle y, además, hará más fácil que el maestro aprenda también sobre aquello en lo que ahora se desenvuelve más lento como son las nuevas tecnologías. 

La información está ahora al alcance de todos y se comparte y ello hace que la inteligencia se convierta en colectiva y el aprendizaje sea colaborativo. El rol de la escuela en general y del maestro en particular pasa a ser un rol de educador como mediador, porque la sola incorporación de las TIC no brinda una correcta dirección al alumno, sino que hay que dársela. Por lo que respecta al papel de la familia, primer filtro en este aprendizaje, debe seguir una misma pauta de mediadora y orientadora en el uso de la tecnología por parte del niño. Las TIC deben ser compartidas también en casa y los padres, igual que los maestros en la escuela, deben compartir lo que saben, escuchar lo que tienen que enseñarle los más pequeños y permanecer en alerta, poniendo los límites que sean necesarios, corrigiendo comportamientos y felicitando por aquellos que consideren correctos.

lunes, 8 de septiembre de 2014

Hablemos sobre la reinvención profesional...

… y la personal, porque al fin de cuentas pasar por un proceso de reinvención en el trabajo o en la vida privada no deja de ser un cambio en tu rutina del que nadie dijo fuera fácil.

Reinventarse es una palabra que lleva implícita varios aspectos. Por un lado un aspecto motivacional, porque induce a movimiento, es decir, se requiere de un esfuerzo y de un trabajo que nacerá de la propia persona y estará orientado a conseguir un fin. Por otro, un aspecto de optimismo, porque ese fin que se querrá alcanzar se supone será mejor que la situación actual que se tenga, pues de lo contrario evitaríamos tener que dedicar tiempo y esfuerzos en el proceso de cambio. El hecho de que el objetivo a alcanzar se vislumbre como mejor que el momento actual retroalimenta la motivación por alcanzarlo pronto, por lo que uno pondrá todo su empeño en hacerlo lo mejor posible. Si nos fijamos se trata de un círculo virtuoso en el que un factor motivacional convive y retroalimenta a un factor de positivismo que, a su vez, retroalimenta al primero.

Pero el concepto reinventarse también lleva implícitas algunas cuestiones: ¿para qué?, ¿por qué?, ¿cómo?, ¿cuándo?... Un análisis a fondo de estas cuestiones sería un estudio necesario que deberías realizar antes de poner en marcha el proceso de reinvención que te propongas.

En este artículo, sin embargo, voy a referirme a aspectos que subyacen a estas cuestiones. Más específicamente al hecho de si la reinvención es una imposición o una elección. A veces la vida te obliga a salir de tu zona de confort en situaciones como pueden ser la enfermedad propia o de un ser querido cercano, en cuyos casos puede aparecer una dependencia hasta el momento inexistente, una ruptura sentimental que puede obligarte a abandonar tu lugar de residencia, un despido laboral que te deja en el paro y en situación de precariedad, etc. Otras veces, en cambio, eres tú quien decides salir de tu zona de confort porque te sientes estancado y te urge un cambio de rutina en lo personal y/o profesional.

Sea impuesta o sea optativa es aconsejable que ante la reinvención que te propones llevar a cabo siempre analices las cuestiones a las que antes hacía referencia, marcándote unos objetivos a corto, medio y largo plazo y estableciendo un plan de acción (que necesariamente irás remodelando) para alcanzar las metas y submetas que te hayas marcado.

La capacidad de creación y la pérdida del miedo a experimentar y equivocarte son tus aliadas en esta nueva etapa. Tienes que ser consciente de que abandonar tu zona de confort no va a ser una tarea fácil y debes, por lo tanto, afrontarla con tu máximo nivel de energía, porque de lo contrario puedes acabar fastidiando el plan y haciendo que te arrepientas de haber decidido emprenderlo. Debes ser consciente también que para llegar a tus objetivos quizás tengas que desviarte temporalmente de los mismos y usar ese desvío como trampolín para saltar con más fuerza hacia el objetivo final. Por ejemplo, en el terreno laboral quizás tengas que ocuparte momentáneamente en lo que puedas y no en lo que quieras, pero no dejes de buscar lo que quieres aunque sea dedicándole un minuto al día; porque lo que está claro es que la inactividad sólo conduce a más inactividad.


Como dijo Jim Rohn, empresario estadounidense, autor y orador motivacional, “Si no te gusta donde estás ¡muévete!, no eres un árbol”. Cita que nos lleva a pensar que ante la necesidad (sea por imposición o por elección) de abandonar tu zona de confort debes conectar tus objetivos personales / profesionales con lo que estés haciendo ahora, dando forma a tus ideas y convirtiéndolas en proyectos concretos que tendrás que poner en marcha sólo cuando consideres estar preparado para ello.

miércoles, 13 de agosto de 2014

El feedback positivo refuerza y reorienta conductas

Reflexionemos sobre la importancia del feedback tanto para reforzar las conductas positivas y mejorar la autoestima como para reconducir las conductas negativas y apostar por la crítica constructiva como elemento de mejora continua dentro del modelo empresarial.

Existe una necesidad humana de sentirse valorado y la falta de ello puede tener consecuencias negativas para el empleado y, en definitiva, para la empresa. La sensación de inutilidad en el empleado puede desembocar en una baja productividad, en un empeoramiento de la calidad en la atención al cliente y en la mala reputación y rentabilidad de la empresa.

Los responsables que gestionan equipos deben hacer un trabajo consciente para identificar los momentos en los que poder reconocer o reconducir ciertos aspectos de la praxis de los miembros de su equipo. Tienen que saber ser empáticos y darles lo que les gustaría recibir por parte de sus superiores, ofreciendo así un servicio de atención a los empleados que seguramente redundará en un aumento de la identidad y de la motivación de estos.

Y no sólo se trata de ofrecer un feedback sobre el trabajo desempeñado por un empleado, se trata además de saber ofrecerlo en las formas adecuadas y acompañado de un sentimiento (al que yo llamo feelback) que haga exponencial el valor de ese reconocimiento y de esa atención. Pero el tener que dar un feedback no debe ser precisamente un “tener que” sino un “querer”, porque todo aquello que se convierta en una obligación deja de tener efecto y sentido, haciendo imposible el feelback y restándole por lo tanto valor al reconocimiento o a la corrección que se pretenda. Por eso hay que trabajar hasta conseguir que el responsable quiera dar un feedback a su equipo y, para ello, hay que tratar muy a fondo todo lo relativo a la empatía, a las emociones y a los valores de ese responsable.

Como gestor de equipos debes aprender a encontrar momentos en tu día a día en los que te sientas bien y seas capaz de transmitir ese bienestar a las personas que te lo brindan, comprobando dos aspectos: el primero, que tú mismo te sientes cómodo dando ese feedback y, el segundo, que el "refeedback" verbal o no verbal que a su vez recibas por parte de esa persona demuestre un agradecimiento que de otro modo, en ausencia de tu reconocimiento previo, no hubiera existido.

Rememorando el Modelo 3F que presenté en uno de mis artículos del pasado año no queda de más recordar que una retroalimentación (concepto de FEEDback) bien planteada y argumentada, con un fondo emocional (concepto de FEELback) acorde a las necesidades personales del receptor y, sobre todo, teniendo en cuenta que es un gesto totalmente gratuito (concepto de FREEback), puede reportarnos un retorno sobre la inversión (ROI) concluyente para mejorar el clima laboral y apostar por la mejora en la atención al cliente.


martes, 5 de agosto de 2014

La verdad está ahí dentro

Recuerdo durante los años 90 una de las frases de la serie estadounidense “Expediente X” (The X-Files) que emitían semanalmente en televisión. En el tema de apertura de cada episodio una voz en off terminaba diciendo “La verdad está ahí fuera” (The truth is out there) y con esta afirmación daba arranque un capítulo misterioso y paranormal.

Esa frase “La verdad está ahí fuera” me viene a menudo a la cabeza cuando afirmo precisamente todo lo contrario porque, como en ocasiones trato de transmitir en mis escritos, “la verdad está ahí dentro”, dentro de cada uno de nosotros, dentro de ti. Fíjate que es tal la fuerza y el poder que tiene nuestro cerebro que puede incluso influir en las vinculaciones genéticas y llegar a cambiarlas.


Voy a explicarme haciendo también uso de un experimento que descubrí el otro día leyendo al divulgador científico Eduard Punset.

Se dividió en dos a un grupo de mujeres que limpiaban un edificio. Al grupo A se les indicó que en vez de estar limpiando un edificio pensaran en que estaban haciendo deporte y para ello se les explicó a qué equivalía cada movimiento que realizaban mientras limpiaban con respecto a lo que sería un ejercicio deportivo. Al grupo B se les indicó sencillamente que su tarea era la de limpiar el edificio. Los resultados demostraron que todas las mujeres del grupo A adelgazaron como si realmente estuvieran haciendo deporte, mientras que ninguna de las del grupo B vio disminuido su peso

La mayoría de las personas damos más importancia a lo que estamos haciendo que a lo que estamos pensando y, al fin de cuentas, lo que estamos pensando tiene mucho más poder del que podemos llegar a imaginar. El funcionamiento de la mente y del cerebro humano es uno de los grandes misterios de la humanidad y, aunque hay un constante avance en la búsqueda por conocer esos misterios, no conocemos ni tan solo una pequeña parte de las energías que se mueven dentro de nuestras cabezas.

Es más potente la autoconcienciación que tengas sobre tu capacidad para conseguir algo, que el hecho de tener a cientos de personas diciéndote que realmente eres capaz de conseguirlo...
  • Por eso, si quieres cambiar algo y estás convencido de poder conseguirlo, seguro lo vas a conseguir. 
  • Por eso, si te sientes en un pozo oscuro y sin fondo y quieres salir de él, vas a ver la claridad acercarse por momentos. 
  • Por eso, si estás convencido de tu potencial humano, vas a ser la mejor madre, el mejor padre o el mejor amigo que uno pudiera desear. 
  • Por eso, si te quieres un poquito más, vas a dejar de ser un gatito para convertirte en el león más bello del mundo.  
  • Y, por eso, si consideras que puedes lograr cualquier meta personal o laboral que te propongas, vas a conseguirla y además con la máxima puntuación.

Y recuerda que todo esto es posible porque al final, por muy de ciencia ficción que parezca, tienes en tu interior algo que si sabes manejarlo y gestionarlo correctamente puede ayudarte a ser una persona completa y sana en todos los aspectos. Aunque por ahora con la mente no puedas cambiar el mundo ya es mucho que sí puedas controlar y cambiar el tuyo. Todo es cuestión de actitud

miércoles, 23 de julio de 2014

Sobre coherencia y marca personal


Se suele decir que una persona es coherente cuando lo que siente, dice y hace coincide. Y en efecto estos son los tres aspectos que tienen que estar en consonancia si queremos hablar de coherencia.

Por muy buenos que sean tus valores, por muy buen orador que seas o por muy correcto que parezcas al ejecutar una acción, si los tres puntos no están alineados nunca podrás trazar una línea recta que te brinde coherencia.

Todos conocemos personas públicas y no públicas cuyos argumentos, sus mítines y su oratoria son perfectos y a priori creíbles, pero que a la hora de la verdad actúan de una manera totalmente contraria a estos valores que en su día transmitían con tanta seguridad. Estos personajes pueden llegar a tener éxito en el corto plazo, pero a la larga sus marcas personales salen escaldadas y con ellas pierden cualquier credibilidad y respeto, generando odio y rechazo por parte de quienes en su día les apoyaron.

Es por ello que aunque en el tiempo sea más lento y costoso uno siempre debe optar por trabajar la coherencia desde sus propios valores, dichos y hechos. Sólo así se asegurará la credibilidad y la firmeza en la huella que deje en los demás tanto a nivel personal como profesional.

Para conseguir un trazo perfecto de tu línea recta personal tienes que comenzar por conocerte primero desde tu interior: cuáles son tus valores, qué sientes cuando haces las cosas de una manera y cuando las haces de otra, cómo te comunicas contigo mismo… porque este es realmente el trabajo más lento y el más difícil. A partir de ahí, la visibilidad de cara a los demás dependerá de tu capacidad para plasmar esos valores y esa labor de autoconocimiento en palabras y hechos y esto ya es cuestión de tener bien definidos el dónde estás y el adónde quieres llegar.

Más potente va a ser la marca personal de una persona con valores perversos y que actúe y defienda sus actos acorde a esos valores que la de una persona con valores perversos que transmita todo lo contrario y, finalmente, acabe por actuar conforme a esa perversión que tiene interiorizada. Si los valores y las acciones no coinciden con lo que uno comunica es muy probable que la estrategia de esa persona acabe por autodestruirse en cuestión de tiempo.

Cualquier curso o programa de comunicación que no empiece por la enseñanza de ciertas capacidades y habilidades para trabajar la autocrítica y el autoconocimiento, no puede tener éxito a la hora de ponerlo en práctica en una empresa o fuera de la misma. La fachada comunicativa no puede ser sólida, consistente y duradera en el tiempo si en el interior las vigas se están tambaleando a su antojo. Es mucho más sencillo transmitir estrategias comunicativas que transmitir trabajo personal hacia el interior de uno mismo, porque para conocerse uno a sí mismo se requiere constancia, tiempo, compromiso y mucha valentía, ya que a nadie le gusta ser consciente de que tiene debilidades que requieren una atención especial.

Mi consejo: "Para conocer bien a una persona, grupo u organización no escuches lo que dice, escucha lo que hace"; recuerda que las palabritas se las lleva el viento.

lunes, 14 de julio de 2014

Las redes sociales y la transformación cultural de las empresas

Las NTIC (nuevas tecnologías de la información y la comunicación) están penetrando de manera viral en todos y cada uno de los estamentos jerárquicos de las organizaciones. A nivel individual y colectivo, personal y profesional, organizado y desorganizado, formal e informal, coloquial y estructurado… las nuevas tecnologías ya forman parte de nuestras vidas como cualquier otro complemento que a diario utilizamos para estar en casa o para salir a la calle.

Si la empresa quiere ser competitiva y no quedarse atrás en su carrera por la supervivencia debe aceptar, estimular y promover el uso de las redes sociales entre sus colaboradores. Estoy de acuerdo en que se requiere un control de la mala práctica que cualquier empleado pueda realizar en horas de trabajo (el uso de redes sociales personales no tiene que tener cabida durante la jornada de trabajo), pero no para ello se debe eliminar por completo el acceso del empleado al manejo de herramientas sociales, pues de este modo estamos capando también la posibilidad de aprovechamiento por parte del empleado, y por ende de la empresa, de todo el beneficio que las redes sociales nos pueden aportar.


Las redes sociales nos permiten acelerar nuestra toma de decisiones, agilizando así la competitividad de los negocios. Ahora no tenemos que estar sólo pendientes del momento en que va a tener lugar una reunión de trabajo para plantear y resolver dudas o sugerencias; las redes sociales nos permiten estar en contacto continuo con aquellas personas que poseen el conocimiento o la capacidad de tomar decisiones estratégicas en la empresa. La dispersión geográfica ya no es un problema, las redes sociales nos permiten reunir ideas y pensamientos de un equipo que físicamente no esté en el mismo lugar. Además, el acceso a la información es tan rápido que en cuestión de segundos pueden disiparse las dudas por las que se esté realizando la consulta y esto repercute positivamente en la agilidad para escoger el camino correcto y poder tomar decisiones.

Un conjunto de personas con la posibilidad de estar conectadas a todas horas y desde cualquier lugar estimula la innovación, multiplica el conocimiento y permite hacer de una organización un negocio inteligente y efectivo. Las grandes empresas ya no deben preocuparse tanto por buscar un experto para cada uno de sus centros de trabajo pues el conocimiento fluye perfectamente a través de la red y, seguramente un menor número de profesionales, pero con buen manejo de herramientas sociales pueden ser más eficaces que profesionales dispersos geográficamente sin más contacto que el que puedan tener en el entorno físico en el que trabajen.

La integración de las redes sociales en la organización se está convirtiendo, y así debe ser, en una transformación cultural. Si tan solo hace unos años se penalizaba el uso de teléfonos móviles durante horas laborales, ahora cualquier aparato tecnológico del que se haga un buen uso puede ser la herramienta de trabajo más potente de la que se disponga. La empresa debe adoptar una mentalidad de aceptación del manejo de las redes sociales por parte de sus empleados, formándoles y dotándoles de las mismas y creando comunidades profesionales enfocadas al emprendimiento de nuevos retos y al alcance de ciertas metas que la hagan cada vez más competitiva.


El uso de la psicología inversa en el entorno laboral

La psicología inversa suena a truco barato, a manipulación, pero en determinadas circunstancias y contextos organizacionales, sobre todo cu...