En esta ocasión os voy a
hablar de la Resiliencia como capacidad que tenemos los seres humanos de sacar
lo positivo en situaciones que realmente no lo son. Pero antes dejadme que os
hable de los Países Bajos; país en el que enmarcaré este concepto psicológico.
El Reino de los Países Bajos
se sitúa en el noroeste de Europa con una superficie de 41mil km2, de los
cuales el 18.40% es agua. Tiene una población alrededor de los 17 millones de
habitantes y han estado habitados desde la última
glaciación. Tierras conquistadas en el s.I a.C. por los romanos, saqueadas por los
vikingos durante los s.IX y XI y bajo el dominio español hasta su
independencia en 1648, tras la Guerra de los ochenta años. Pero sin duda uno de sus golpes más
duros y recientes ocurrió durante la II Guerra Mundial (1939-1945). Aunque se declararon
neutrales, Alemania lanzó un ataque contra los Países Bajos conquistando la
mayor parte del país y persiguiendo a los judíos, quienes fueron declarados
enemigos del estado. Es en este periodo y concretamente en su capital,
Ámsterdam, donde se ubica una de las historias más conocidas: la de Ana Frank,
la niña judía que tuvo que vivir escondida junto a su hermana, sus padres y
cuatro personas más en una dependencia secreta de un edificio de oficinas
frente al canal Prinsengracht de la capital holandesa.
Casa de Ana Frank, en Prinsengracht 263-267 |
Si habéis leído su Diario o conocéis su historia, entenderéis por qué hablo de Ana Frank como un claro ejemplo de persona resiliente.
Pero antes, ¿qué es la resiliencia?
Para los que nunca hayáis
escuchado esta palabra os la explicaré como me la enseñaron a mí; con una de esas metáforas que a veces ayudan a asimilar conceptos que forman parte del mapa
abstracto de la mente humana.
“Pensad en una goma, que la
estiráis para adecuarla alrededor de un objeto, pero cuando la dejáis suelta
vuelve a su estado y forma original. Pensad también en una esponja, que la
presionáis para escurrir el agua que ha absorbido, pero que al soltarla vuelve a
tener su misma forma inicial”
Esto es la resiliencia, la
capacidad de adaptarnos a una situación adversa y salir de ella “airosos”, en el
sentido de poder volver a ser la misma persona que fuimos, aunque obviamente
con un aprendizaje extra que ya nadie nos puede quitar. La resiliencia es, por lo
tanto, una capacidad que puede tener un componente innato, pero que en realidad
se adquiere y refuerza a través de la experiencia y las vivencias que uno tiene
a lo largo de su vida y el cómo éstas le influyen y las afronta.
Para afrontar adversidades,
para salir reforzado de éstas y para conseguir llevar una vida tranquila y
normal a partir del acontecimiento adverso se requiere tener muy trabajados
otros aspectos de la Inteligencia emocional, entre ellos:
Autocontrol: capacidad de dominar las propias emociones, pensamientos, comportamientos...
"Querida Kitty: Hace sol, el cielo está de un azul profundo, hace una brisa
hermosa y tengo unos enormes deseos de...¡de todo! Deseos de hablar, de ser
libre, de ver a mis amigos, de estar sola. Tengo tantos deseos de...¡de llorar!
Siento en mí una sensación como si fuera a estallar, y sé que llorar me
aliviaría. Pero no puedo. Estoy intranquila, voy de una habitación a la otra,
respiro por la rendija de una ventana cerrada, siento que mi corazón palpita
como si me dijera '¡Cuándo cumplirás mis deseos!'. Creo que siento en
mí la primavera, siento el despertar de la primavera, lo siento en el cuerpo y
en el alma. Tengo que contenerme para comportarme de manera normal, estoy
totalmente confusa, no sé que leer, qué escribir, qué hacer, solo sé que ardo
en deseos... Tu Ana"
(Diario de Ana Frank. 12 de febrero de 1944)
(Diario de Ana Frank. 12 de febrero de 1944)
Autoconocimiento: conocerse
a uno mismo, saber cuáles son los puntos fuertes y las áreas de mejora...
"Sé perfectamente cómo me gustaría ser y cómo soy... por dentro, pero
lamentablemente solo yo pienso que soy así. Y esa quizá sea, no, seguramente
es, la causa de que yo misma me considere una persona feliz por dentro, y de la
gente que me considere una persona feliz por fuera"
(Diario de Ana Frank. 1 de agosto de 1944)
(Diario de Ana Frank. 1 de agosto de 1944)
Motivación:
encontrar aquello que te gusta, que te apasiona y te empuja a hacerlo con mayor
implicación.
"Ahora otro tema: hace mucho que sabes que mi mayor deseo es
llegar a ser periodista y más tarde una escritora famosa. Habrá que ver si
algún día podré llevar a cabo este delirio (?!) de grandeza, pero temas hasta
ahora no me faltan. De todos modos, cuando acabe la guerra quisiera publicar un
libro titulado La casa de atrás; aún está por ver si resulta, pero mi diario
podrá servir de base"
(Diario de Ana Frank. 11 de mayo de 1944)
(Diario de Ana Frank. 11 de mayo de 1944)
Confianza:
esperanza firme para que algo suceda.
"Solo espero una cosa: que se odio a
los judíos sea pasajero, que los holandeses en algún momento demuestren ser lo
que son en realidad, que no vacilen en su sentimiento de justicia, ni ahora ni
nunca, ¡porque esto de ahora es injusto!"
(Diario de Ana Frank. 22 de mayo de 1944)
(Diario de Ana Frank. 22 de mayo de 1944)
Optimismo:
juzgar las cosas y los acontecimientos desde la parte más positiva
"Querida Kitty: ¡Me han vuelto las esperanzas, por fin las cosas resultan!
Sí, de verdad, ¡todo marcha viento en popa! ¡Noticias bomba! Ha habido un
atentado contra Hitler y esta vez no han sido los comunistas judíos o los
capitalistas ingleses, sino un germanísimo general alemán, que es conde y joven
además"
(Diario de Ana Frank. 21 de julio de 1944)
(Diario de Ana Frank. 21 de julio de 1944)
Voluntad:
deseo o intención para hacer algo.
"Sé lo que quiero, tengo una meta, una
opinión formada, una religión y un amor. Que me dejen ser yo misma, y me daré
por satisfecha. Sé que soy una mujer, una mujer con fuerza interior y con mucho
valor. Si Dios me da la vida, llegaré más lejos de lo que mamá ha llegado
jamás, no seré insignificante, trabajaré en el mundo y para la gente. ¡Y ahora
sé que lo primero que hace falta es valor y alegría!"
(Diario de Ana Frank. 11 de abril de 1944)
(Diario de Ana Frank. 11 de abril de 1944)
Aceptación: aceptar
la realidad, plantarle cara y seguir hacia delante.
"Hemos vuelto a tomar
conciencia del hecho de que somos judíos encadenados, encadenados a un único
lugar, sin derechos, con miles de obligaciones. Los judíos no podemos hacer
valer nuestros sentimientos, tenemos que tener valor y ser fuertes, tenemos que
cargar con todas las molestias y no quejarnos, tenemos que hacer lo que está a
nuestro alcance y confiar en Dios. Algún día esta horrible guerra habrá
terminado, algún día volveremos a ser personas y no solamente judíos"
(Diario de Ana Frank. 11 de abril de 1944)
(Diario de Ana Frank. 11 de abril de 1944)
A pesar de su trágica vida
por ser de familia judía, de tener que estar escondida en una casa-zulo en el
corazón de Ámsterdam y, tras ser descubierta, tener que permanecer en los
campos de concentración de Auschwitz (Polonia) y Bergen-Belsen (Alemania), Ana
Frank tuvo la fuerza necesaria para hacer frente a esas adversidades,
superarlas de algún modo y transformarlas en algo positivo: las líneas de su
Diario.
Aunque no pudo conseguirlo personalmente, Ana siempre tuvo la ilusión de publicarlo y convertirse en una gran escritora. Esa ilusión, ese sentido que ella le daba a la vida, le ayudó a lograr ser una persona con alta capacidad de resiliencia.
Sin que ella pudiera verlo, su Diario ha sido traducido a 70
idiomas y supera los 30 millones en ventas.
Ya han pasado 11 años de esta foto, pero es la única que conservo de aquella visita a la Casa de Ana Frank. Os invito a leer su Diario. ¡Yo ya lo hice! :) |
Otros artículos de este blog que te recomiendo leer:
No hay comentarios:
Publicar un comentario