miércoles, 27 de abril de 2022

La relación entre los RRHH y la responsabilidad medioambiental

Cuando pensamos en la función del departamento de Recursos Humanos en la empresa solemos atribuirle tareas relacionadas con la selección, la contratación, la formalización de escritos y permisos, la gestión de nóminas y la formación, pocas más. Pero el departamento de RRHH es un departamento aún más estratégico que todo eso, pues tiene sinergias directas con todos las demás áreas de la empresa, de quienes se nutre y a quienes nutre para crear vínculos indispensables para el buen funcionamiento de la compañía, además de para el cuidado de la imagen y reputación internas y externas. Entre otras cosas, “los de recursos humanos” también cuidamos de la imagen corporativa en materia de concienciación ecológica y medioambiental, tema muy de moda en el ámbito social y político de la mayoría de los países del planeta en la actualidad. 

El departamento de recursos humanos, junto con los de marketing y comunicación, en el caso de que existan dentro de la organización, pueden promover la concienciación y puesta en práctica de la responsabilidad medioambiental a través del outsourcing empresarial, pero también de manera directa e interna sin la necesidad de externalizar servicios. Podemos incidir mediante campañas vinculadas a la venta, en las que hacemos partícipes a clientes y comerciales, también a través de charlas informativas o incluso a través de eventos y formaciones outdoor. Hoy en día el éxito de las empresas se consigue no sólo a través del cumplimiento de márgenes de venta y presupuestos, sino también a través de diferentes políticas internas, como aquellas que van orientadas a la responsabilidad ética y a la promoción de acciones de bien común.

Es muy importante que desde los departamentos de recursos humanos se haga difusión de estas políticas en las que se propongan y dinamicen programas que contribuyan al aprendizaje de buenas prácticas en lo referente al consumo energético y al reciclaje o a la optimización de rutas de transporte para evitar el consumo innecesario de combustible o la promoción del uso del transporte público, por ejemplo. Además de colaborar con otros departamentos como el de marketing para la colocación de contenedores en las zonas comunes que faciliten el reciclaje de residuos, con el departamento de compras para fomentar el aprovisionamiento de papel reciclado, que fomenta el cuidado de los bosques del planeta, o con el departamento de mantenimiento para la instalación de energías renovables que consuman menos, los departamentos de recursos humanos pueden adoptar medidas y políticas que contribuyen directa o indirectamente al cuidado de nuestro planeta: teletrabajo, que permitirá un ahorro energético en las empresas y multitud de desplazamientos en coches de los empleados desde sus casas hasta el lugar de trabajo; flexibilidad horaria, que permitirá aprovechar al máximo las horas de luz natural, etc.

Alineándonos con la problemática medioambiental existente en la actualidad, una vez más, existirá repercusión en todos los ámbitos en los que intervienen las empresas, que además de pensar en el corto y medio plazo, deben incorporar en su visión de futuro la responsabilidad social corporativa que fomente políticas de ayuda altruista basada en valores como la honestidad, la vocación puramente social y el medio ambiente.

La responsabilidad social corporativa es a menudo un concepto bastante desconocido entre los empleados cuando se le alude a él y, de la misma manera que las siglas PRL (prevención de riesgos laborales) ya son bastante conocidas por la amplia mayoría, es momento de que RSC resulte también familiar. Las preocupaciones económicas, sociales y medioambientales en la gestión empresarial deberían pasar de ser imposiciones requeridas por Ley a preocupaciones realmente personales a las que encontrar soluciones mediante el voluntarismo, el altruismo y la ética.